Epilogo

 
Caminando por las calles de Oklahoma podia sentir la familiaridad de la vida que marcaba un antes y un despues, la ciudad se habia levantado de entre las ruinas y ahi me encontraba de nuevo habian pasado 7 años en Nimacre, el suficiente tiempo aqui en la tierra para que se recuperara, ayudabamos en lo que podiamos, estando vuelta aqui y haya, Steve hizo un estupendo trabajo con la reconstruccion, jamas habria manera en que se lo agradeciera completamente y sin embargo el parecia complacido. Su sonrisa habia vuelto, no tan luminosa y alegre pero ahi estaba, extrañaba a Vanessa pero se distraia cuando pasaba el tiempo con su hijo y nieta, la niña se llamaba Valerie y tenia la misma actitud que Steve con el cabello de Kat y las facciones de Sean. Yo realmente no la conocia en persona pero sabia por Sean que habia comenzado su entrenamiento como cazador que era preciosa y amigable.
Era mediados de diciembre y el frio se habia vuelto mas intenso, la llovizna que habia comenzado por la mañana se habia congelado y pequeños copos de nieve caian del cielo oscurecido cubriendo las calles y avenidas principales, la gente iba de un lado a lado y los autos pasaban veloces uno tras otro, el ruido era ensordecedor, habia un hombre vendiendo periodicos gritando las ultimas noticias, personas saliendo y entrando de las tiendas y restaurantes, sabia que el centro comercial estaba tan abarrotado como las calles pero yo sabia que tenia que encontrarlo.
Un par de niños corriendo hacia el parque a unas calles de ahi, una señora gritaba sus nombres mientras corria detras de ellos, sonrei, recorde a Miranda persiguiendo a sus gemelos para que no terminaran rompiendo algo, peleandose entre si o haciendo alguna travesura en esas veces en que la quietud del castillo se terminaba. La niña era castaña con unos preciosos ojos azules y sonrisa angelical, el pequeño era como ver a Connor cuando era niño, era mas calmado que su hermana y sabiamos todos quien era quien. Se llamaban Danielle y Daniel, a veces si era muy confuso llamarlos a los dos.
Hayley seguia en Nimacre, ese sitio le encantaba y parece que era una novedad para todos ahi, seguia sin creer que alguien pudiera invitarla a salir pero Damon a veces decia que le habria encantado llevarla a dar un paseo por el bosque de litio, sabia que si se sonrojaba era porque algo mas habia pasado entre ellos. Logan seguia siendo el mismo de siempre y el seguia en el castillo como si fuera un guardian y su trabajo aun no hubiera terminado a pesar de la decision de Miranda el la trataba igual que siempre y los gemelos lo consideraban su tio, Logan no podia tener favoritismos, los niños siempre iban a pelear por su atencion.
Adrahm y Jesse habian vuelto al grupo, Adrahm era el lider y Jesse bueno, el sabia las reglas pero aun asi parecia disfrutar de las batallas como si fueran las ultimas, a Adrahm le sucedia lo mismo que a mi, aun los extrañabamos muchisimo y era algo irreparable, su mirada tenia esa melancolia que siempre iba a permanecer, pero en la superficie era el mismo. Aquel que no se podia enamorar de nadie porque la chica del prado siempre habia sido la unica, la unica que le robo le corazon.
-mami-Alex jalo de mi chaqueta llamando mi atencion, mire hacia abajo, sus verdes ojos me miraban con una graciosa expresion de confusion-tengo hambre-solte una risa mientras hacia que pasara delante mio esquivando a las personas
-mm que te parece si vamos aqui-señale un restaurante de comida rapida, el rostro se le ilumino y de pronto se olvido del frio que se sentia-¿que es lo que se te antoja mi pequeño?-dije agachandome a su altura mientras le hacia cosquillas, el rio a carcajadas contagiosas
-¡pizza!-grito emocionado, medite sus palabras, el no estaba ahi en esos momentos para reprocharme (como siempre!) que dejara de malcriarlo no es que el fuera mejor que yo, si el hacia lo mismo cuando no tenia nada mas que hacer. El era todo para mi, crei que no podia sentir un amor mas grande, sin embargo me habia equivocado.
-de acuerdo pero no le digas nada a tu padre, sera nuestro secreto-
-si-me aseguro serio-no dire nada si son dos-dijo contandolo con sus deditos mientras me sonrei, aquella sonrisa que me desarmaba por completo
-ay mi amor-susurre, su mano se deslizo entre la mia y corrio sin cuidado hasta la mesa de asientos acolchonados para mas de 3 personas. Subiendo como pudo se quedo ahi un rato jugando con el servilletero y el salero mientras pedia la orden. Joseph Alexandre era lo mejor que nos haya podido haber pasado a Jesse y a mi. Su cabello castaño estaba revuelto y mojado a causa de los copos de nieve, se habia desabrochado la chaqueta y estaba casi a media mesa jugando a sabra dios que, regrese a la mesa con la comida y el sonrio timido volviendo a poner las cosas en su lugar. Logan decia que se parecia a mi, era muy timido pero cuando estaba con personas que conocia desde siempre era diferente, mas soñador y menos impulsivo que Jesse, una inocencia que jamas habia visto en nadie. Solo por el retrasaria mi encuentro pero el lo entenderia asi que ahi pasamos media hora. Veia maravillada a mi hijo de 6 años pensando cuando el fuera a la Academia y juraba que no me iba a ser algo facil pero habia cambiado muchas cosas, los niños que algun dia serian cazadores ingresaban a los 12 años como antes, sus padres podian ir a visitarlos cuando quisieran, yo queria vigilar y ver que clase de pruebas y metodos utilizaban pero Dimitri no me lo permitio, dijo que se haria cargo y que cambiaria las cosas sin dejar las tradiciones.
Alex se puso de pie y se quedo mirando a la entrada con el ceño fruncido, luego miro su plato vacio y luego a mi
-¿que sucede?-nego con la cabeza y bajo del asiento dando un salto-esta bien, ya es hora supongo que ha de estar esperandonos-Alex alzo su brazo y yo lo tome, su mano pequeña y calida entre la mia. Sus pasos eran mas cortos que los mios asi que alente la marcha, salimos de ahi no sin antes abrochar de nuevo su chaqueta, hizo un puchero de lo mas tierno pero lo ignore, no podia permitir que saliera ahi, ya era bastante que el me acompañara, no queria que se enfermara.
El cielo estaba estrellado y despejado, la nieve se habia detenido dejando solo charcos aqui y haya, Alex miraba hacia el cielo con curiosidad y sorprendido. Sonrei pero a media calle pare en seco, el avanzaba a pasos agigantados hacia nosotros y cuando menos me lo esperaba ya estaba ahi. Alex solto mi mano mientras gritaba emocionado, la ilusion llego a los ojos de Jesse cuando se dio cuenta de nuestra presencia y de que nuestro hijo corria hacia el. Lo alzo y le dio vuelta mientras Alex reia con fuerza, luego los dos se acercaron a mi, Jesse me sonrio de medio lado, aquella que le vi por primera vez, siempre que nos encontrabamos luego de alguna mision o algo por el estilo.
Y entonces recordaba el momento en que abri la puerta de mi casa hace años y ellos aparecieron. Alex solto una risotada que me trajo a la realidad, Jesse no lo solto, tampoco cuando paso su brazo por detras de mi espalda y me acercaba a el, Alex se inclino y me dio un beso en la mejilla, luego se recosto en el pecho de Jesse y cerro los ojos, segundos mas tarde estaba profundamente dormido, mire a Jesse que lo contemplaba en silencio y rei por lo bajo
-¿que es tan gracioso preciosa?-pregunto, solo le sonreia. 
Despues de todo fue el quien me saco de mi casa, aquel dia que nunca podre olvidar.

FIN