-es emocionante ver que al fin has cambiado de opinion-susurro Kandrak mirandolo fijamente, el simplemente resoplo
-claro como me encanta el lado oscuro y usar esas comodas batas de dormir que siempre usas-
-imbecil-murmuro Damian al lado de Kandrak-
-no mas que tu-
-¿que dijiste?-
-lo que tu quieras escuchar-
-bueno no podrias hacer algo de una vez, ya me esta hartando-le dijo Marcus con una mueca de desagrado
-no lo se bien, ahora que esta aqui, no se que hacer-
-te sugiero algo: matalo-
-oh por favor, ambos sabemos que puedes hacer mas que eso, vamos! torturame, matame de aburrimiento yo que se-Kandrak levanto su rostro dejando ver una pequeña marca circular en su palida mejilla, aun despues de tanto tiempo segui rojiza como si fuera reciente-que genial que aun tengas mi pequeño puño de niño de 8 años en tu cara-
-te parece gracioso-se dio la vuelta-te parece gracioso aun despues de todo, ¿no piensas en ellos acaso?-
-si, pero no dejo que eso me amarge la existencia como a otros-
-tan insolente como siempre-
-si bueno vas a asesinarme o te vas a quedar ahi parado-
-no me apresures-contesto el con toda la calma del mundo mientras observaba por la ventana, por el reflejo pudo ver como golpeaba a Marcus que se habia distraido y luego derribaba al otro guardia, quemando su rostro, luego de eso todos ahi se quedaron paralizados y nadie fue capaz de detenerlo, salio de la habitacion y antes de que llegara mas lejos, la unica consentida del lugar aparecio
-deripare-susurro y el cayo al piso, sin estar plenamente inconciente fue arrastrado escaleras abajo por un par de guerreros, cuando al fin llegaron a la morgue Sam empujo una camilla, y se alejo a un estandarte buscando algo de unas cajas de plastico, los guerreros lo levantaron y lo dejaron caer en la silla para luego alejarse con sus caracteristicos gruñidos, Sam regreso depositando algo en una mesa de superficie metalica, ella sujeto sus manos a cada lado y lo amarro con una vieja correa tan apretada que sintio que cortada su circulacion, eso no le dio tiempo de pensar en lo que ella iba a hacer, grito algo y el mismo guerrero aparecio y se arrodillo delante de ella, veia solo borrosamente por lo que no supo bien que fue lo que ella habia echo para que gimiera el guerrero de dolor, luego le ordeno que se marchara
-debiste de haberte quedado conmigo cuando te lo propuse-le dijo ella preparando algo a su lado-pero ahora es demasiado tarde para cambiar, decidiste seguir un camino que no te va a llevar a nada-
-da igual eso ahora-dijo a duras penas
-lo se-alzo la mano observando como de la punta de la reringa de metal salia una pequeña gota negruzca-en verdad me gustabas Jesse, no entiendo como pudiste haberme echo esto-con furia arremango su camisa y coloco la punta en su antebrazo pero se detuvo, dejo escapara una exclamacion cuando alguien en lo alto abrio la puerta y la llamo por su nombre completo
-princesa de hielo, vas a volver a experimentar para llevar a cabo tus planes malignos
-claro Marcus, ¿como va tu nariz?-el la miro con rabia y luego miro a Jesse, se cubrio la nariz para que aunque estuviera ya casi inconciente no viera que habia acertado en el golpe ciego
-que le vas a hacer, ¿inyectarle esa cosa?-
-mmm eso pense pero...-
-pero que-
-¿aun tienen los cuerpos?-
-sabes que estan guardados por aca-Marcus jalo varias gavetas, los cuatro cuerpos cubiertos por una añeja sabana que en otro tiempo fue blanca, todas eran mujeres, a una de ellas se le escapaban rizos cobrizos, inevitablemente le recordaron a Caroline
-¿y la sangre?-
-porque tanto interes en ellas-
-¿donde esta?-
-en donde tienes a todos esos asquerosos especimenes raros-ella camino hacia el cuarto de refrigueracion y saco un tubo de ensayo con un liquido carmesi-¿de quien es?-le pregunto Marcus retrocediendo dos pasos
-de la guerrera-tomo otra jeringa y lo lleno hasta la mitad, Jesse ya no podia verla mas y apenas y podia escucharla, pero si podia sentir, y el agudo dolor que comenzo en su brazo lo dejo paralizado, el unico dolor que se asemejaba a ese fue la primera vez que manejo al fuego, la unica vez que habia podido aumentar su poder sin llegar al limite, y es mismo dolor que hacia que sintiera su cabeza estallar y como si de la peor de las torturas se tratase, dejo de luchar y pronto abandono todo lo que le rodeaba, ya no podia respirar sin sentir una fuerte punzada de dolor asi que dejo de hacerlo, mientras Sam veia con asombro lo que la sangre de guardiana causaba en los cazadores, pero dio el mismo resultado que si hubiera sido sangre de guerrero
-que bien, lo mataste mas rapido de lo que pense, te felicito-susurro Marcus tratando de ocultar su espanto
-nada de lo que hago ultimamente funciona, es como si solo lograra matar todo lo que toco-aparto un mechon rubio de su rostro y bufo molesta por los incesantes ruidos de arriba-en fin sera mejor que me prepare, ¿recuerdas el papel que la estupida de Smith robo?-
-¿si?-
-pues lo que decia no era una fecha, era la pagina del libro Del Reino de Oro que libera a Angel Sun-
-en ese caso, vas a obligarme a quedarme-
-no te lo estoy...bueno da igual ya me voy-Sam abrio la puerta trasera de donde aparecio Damian
-¿lo...mato?-Marcus asintio-y te quedaras-
-no lo se, quiza-
-bueno de todas maneras te lo iban a ordenar-
-cuando no-
-es increible-
-de que hablas-
-de que el lo este, de que esta muerto Marcus asi que pronto llegaran esos, quiero te que quedes aqui de guardia, saldre a buscar a Kandrak-
-lo que sea Damian, oye ¿como es posible que algo asi venciera a Van Santen?-
-nose, Sam creyo que resitiria a lo que fuera que le haya puesto pero el es igual de debil que los cazadores anteriores-
-ya lo creo-Marcus se rio, Damian dio la vuelta en el pasillo continuo al despacho principal en donde su Amo se encontraba, mientras Marcus se cruzo de brazos en la puerta y empezo a silbar una cancion de su niñez, le molestaba un poco tener que vigilar un cuerpo inerte desde hace horas, porque en la morgue de Sam que se habia encaprichado en tener era algo terrorifica pero de algo podia estar seguro, ahi todos los que tenian su propio compartimiento estaban muertos, el filo de una daga le rozo la piel del cuello
-y esto imbecil es por todos ellos-y antes de que gritara o intentara defenderse fue decapitado, quiequiera que le haya dicho que el estaba muerto, cometio un grave error
Alguien me jalo hacia atras y pude respirar nuevamente, agitada mire hacia todos lados, habian empujado a Adrahm puesto que estaba sentado en el piso a unos metros de nosotros y Jesse seguia en el suelo con los ojos cerrados
-algo anda mal ¿verdad?-nos pregunto
-si, te inyectaron sangre de guardiana-
-¿que? ¿de que estas hablando?-Elena paso al frente pero se detuvo por Dimitri
-¿y puedo morir por eso?-Adrahm lo miro realmente enojado
-claro es mas ahora estamos hablando con tu espiritu-
-esperen esperen-Damon alzo los brazos como en son de paz-tiene sangre de guardiana combinaba con la suya y no lo mata pero lo hace querer asesinarnos-
-yo no quiero matarte-segundos despues Jesse sonrio-a quien engaño claro que quiero-se levanto de un salto y se abalazo sobre Damon pero este lo esquivo justo a tiempo, segundos despues Logan y Jack lo lanzaron contra la pared y Adrahm lo detuvo
-tenemos que sacarte de aqui-
-intentalo-lo reto mirandolo divertido
-Len, ¿en donde dijiste que se encontraba Vaetch?-Dimitri se giro hacia el chico de la gabardina
-se dirigio a la Academia-
-¿que planeas?-
-no intervengas Elena, llevalas a ellas y a los humanos con los sabios, necesitan conocer a Emily, entendido-
-si, claro-Elena hizo el ademan de que la siguieramos y en silencio lo hicimos
-¿que haran con el?-le pregunte cuando estabamos lo bastante alejadas, mientras subiamos por unas angostas escaleras
-no te preocupes, Vaetch sabra que hacer-camino cada vez mas rapido hasta llegar a un pasillo, luego dio unos suaves toquidos y una serena voz femenina le contesto del otro lado-quedense aqui, ya regresamos
-pero, quines estan...-la pregunta de Kat quedo en el aire, Elena giro la perilla y abrio la puerta con inscripciones talladas (como el papel de la fecha que la chica del desierto nos habia lanzado) y entramos, la sala apenas estaba iluminada en la mesa del centro habia regado cientos de papeles, habia un bote de tinta al lado y la pluma se encontraba a su lado manchando un espacio en blanco, habia 5 sillas, pero solo tres estaban ocupadas, y las tres personas alzaron la mirada hacia nosotras
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